Y se abrió el cielo y llovió a mares......pero no nos importó lo más mínimo. Nos arremangamos los pantalones, abrimos lo paraguas y nos pusimos a hacer turismo por Alcalá. Y para entrar en calor tapeamos un poquito y nos metimos entre pecho y espalda un cocidito alcalaíno. Y nos reímos y lloramos y nos hicimos regalitos. Y el día pasó en un suspiro. !Que pronto se acaba lo bueno! Pero habrá más, ya lo creo, muchos más encuentros. Aún no se había acabado éste que ya se estaban haciendo
planes para dos o tres más. Porque tenemos que seguir cosiendo el quilt invisible de nuestra familia del patch, que estamos uniendo con nuestras vivencias, convivencias y ratos compartidos.
Como se lo han currao las niñasss.